Los vinos blancos dulces son perfectos para quienes disfrutan de aromas frutales, texturas sedosas y ese equilibrio perfecto entre acidez y dulzor.
Aquí tienes 3 tips para acertar siempre con tu elección.
1. Conoce los estilos de vinos dulces
No todos los vinos dulces son iguales. Dependiendo de tu paladar, puedes elegir entre diferentes estilos:
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Vinos de postre: Como el Moscato o el Cosecha Tardía, ideales para acompañar postres o disfrutar solos.
- Vinos dulces naturales: Un vino dulce natural es aquel que obtiene su dulzor de manera natural, ya sea por la concentración de azúcares en las uvas o por la interrupción de la fermentación, sin necesidad de añadir azúcar externamente.
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Vinos fortificados: Como el Oporto o el Jerez, que tienen un mayor contenido alcohólico y un sabor intenso.
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Vinos espumosos dulces: En argentina existen muchos espumantes dulces, perfectos para celebraciones.
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Vinos de pasas: Como el Pedro Ximénez, con un sabor concentrado y muy dulce.
2. Combínalo con la ocasión y la comida
Un vino blanco dulce puede ser el protagonista de cualquier momento, pero elegir el adecuado depende del contexto:
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Para un aperitivo: Un Moscato o un Riesling semidulce son ideales para empezar una velada con frescura.
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Para maridar con comida: Los vinos blancos dulces combinan maravillosamente con platos especiados, como la comida tailandesa o india, o con quesos cremosos como el brie.
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Para postres: Los cosecha tardia son perfectos para acompañar postres de frutas o chocolate.
3. Informate antes de ir a la vinoteca o el supermercado
Aplicaciones como "Vivino" son fundamentales para realizar una compra con información de respaldo. Alli podrás ver reseñas y comentarios de otros usuarios que probaron vinos con anterioridad y comparten su opinión.